El nuevo edificio que albergará al Archivo General Agrario (AGA) será una suerte de puerta al Centro Histórico desde el corredor Reforma-Juárez.

La obra, que lleva un avance superior al 86 por ciento, se construye en los predios de Juárez 92 y Humboldt 35, los cuales fueron fusionados en 2021 por el Gobierno de la Ciudad de México a través de la figura Polígono de Actuación prevista en las normas de desarrollo urbano.

Con la unión de predios se obtuvo un terreno de unos 5 mil 228 metros y la posibilidad de un edificio de hasta 27 niveles.

Sin embargo, el AGA tendrá sólo ocho niveles, además de tres sótanos y una plaza pública; desarrollo en manos de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).

El desarrollo reemplaza a un edificio en desuso de diez niveles que resultó afectado por los sismos de 1985 y 2017, mismo que fue sede de dependencias como la Contraloría General.

El proyecto, además de instalaciones del Registro Agrario Nacional donde se podrán realizar trámites, contempla espacios públicos al exterior e interior del edificio, un museo, una terraza/mirador con restaurante, tienda/cafetería, un jardín botánico de acceso gratuito y librería.

El AGA contiene un acervo de alrededor de 50 mil kilómetros lineales de documentos históricos sobre la propiedad social en México.

El diseño del inmueble busca transmitir la importancia del agrarismo mexicano y la preservación del territorio nacional, de acuerdo con la Sedatu.

La dependencia detalla que el proyecto lleva una inversión de unos dos mil millones de pesos.

El proyecto privado que no fue

Originalmente, el Gobierno de la Ciudad de México dio a conocer que vendería el predio ya fusionado a los desarrolladores inmobiliarios que ofrecieran las mejores condiciones, tanto económicas como arquitectónicas, para que el inmueble de hasta 27 pisos conviviera con el Centro Histórico y espacios públicos como la Alameda Central, que se ubica prácticamente enfrente.

El Polígono de Actuación permitió la construcción de hasta 46 niveles, pero la Norma de Ordenación Particular Referente a Alturas de Edificación y Restricciones en la Colindancia Posterior del Predio del Programa Parcial de Desarrollo Urbano del Distrito Federal Centro Alameda limitó el proyecto a 27.

El dinero obtenido por la venta del predio se ocuparía en el desarrollo de otros proyectos gubernamentales, dijo en julio de 2021 Claudia Sheinbaum, entonces jefa de Gobierno de la Ciudad de México y hoy Presidenta electa.

En agosto de ese año, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda dio a conocer que la oferta del predio había levantado el interés, en primera instancia, de 20 desarrolladores inmobiliarios, luego bajó a 15 y la última cifra pública fue de seis grupos inversionistas interesados.

Sin embargo, el 6 de agosto de 2021, Sheinbaum dio a conocer que el Presidente Andrés Manuel López Obrador solicitó el predio para la construcción del AGA.

“El Presidente de la República nos llamó previo a esta venta y nos pidió que este espacio pudiera ser el espacio para el Registro Agrario Nacional, para los archivos del Registro Agrario Nacional y por supuesto que es un espacio muy importante”, dijo Sheinbaum.

En ese momento destacó que el AGA cuenta con mapas de la época de la Colonia y anteriores, documentos históricos de la propiedad social, de ejidos y comunidades, entre otros.

Beneficios sin el mayor provecho

El inmueble del AGA llevará beneficios a esa zona del Centro Histórico, entre ellos atracción de inversiones para desarrollar nuevos proyectos inmobiliarios en calles como Humboldt, Iturbide y Artículo 123, consideró Roberto Remes, experto en movilidad y urbanismo.

También atraerá negocios pequeños del tipo que se instala alrededor de oficinas gubernamentales, como escritorios públicos, servicio de fotocopiado e internet, papelerías o fondas, agregó.

Pero existe el riesgo de que estos negocios sean informales y se instalen en las calles cercanas como ya ocurre en otras áreas de oficinas gubernamentales.

Sin embargo, el especialista consideró que el proyecto no explota todo el potencial económico del predio ubicado muy cerca del cruce de Juárez y Paseo de la Reforma.

Estimó que el precio por metro cuadrado del predio asciende a unos 100 mil pesos y calculó que el Gobierno de la Ciudad de México dejó de percibir, al menos, unos cinco mil millones de pesos por el desarrollo del proyecto inmobiliario privado.

Además, el gobierno federal desembolsó otros dos mil millones de pesos para la construcción del proyecto de Sedatu, que encabeza Román Meyer Falcón.

El AGA tampoco atraerá la inversión de empresas como las que hubiera conseguido una torre privada, como tiendas departamentales, de conveniencia o cadenas internacionales.

“Esa decisión costó siete mil millones de pesos, dos mil al gobierno federal y cinco mil a la ciudad por costo de oportunidad”, dijo.

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