El Presidente Andrés Manuel López Obrador, reveló hoy jueves que ofreció abastecer a Alemania con gas natural de México, ante los problemas de aprovisionamiento por el conflicto con Rusia, y estimó que cubriría en 30% sus necesidades del combustible.
López Obrador informó en su conferencia mañanera del ofrecimiento que le hizo al presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, durante su visita la semana pasada en México.
“Ahora que estuvo el presidente de Alemania le planteamos que, no por cuestiones comerciales, sino para apoyar, como lo hacemos con todos, podríamos enviar gas, tenemos gas”, aseveró.
Cuestionado por la cantidad, López Obrador aseguró que el gas natural de México serviría para abastecer el 30% de lo que necesita Alemania, al citar que el país europeo tenía un contrato de abasto de gas con Rusia y cerró sus plantas nucleares.
El Presidente reconoció “que llevaría tiempo” porque México necesita la construcción de dos plantas de licuefacción para congelar el gas y mandarlo.
Aunque indicó que hay una compañía de Estados Unidos, New Fortress Energy, con tecnología que permite transportar el gas en barcos sin la necesidad de construir una planta en tierra.
“En el mismo barco el gas se congela y se lleva y allá se regasifica en el puerto donde hay el ducto, o sea, ya se ha avanzado en eso. De todas maneras, ellos tendrían que hacer el acuerdo con esta empresa estadounidense, pero nosotros sí tenemos disponibilidad de gas”, expuso.
México, afirmó, tiene gas excedente porque hay contratos del hidrocarburo para la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y también se está extrayendo de los nuevos campos petroleros que el país está explotando.
“Entonces sí podríamos ayudar, nada más es cosa de que ellos lo decidan”, indicó.
Su ofrecimiento ocurre tras relevarse que muchos países europeos caerán en recesión en 2023 si hay problemas de aprovisionamiento en gas los próximos meses, de acuerdo con un informe del lunes pasado la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
La OCDE corrigió en el reporte sus estimaciones sobre la progresión del producto interior bruto (PIB) de la zona euro para el año próximo para dejarla en el 0.3%, con una corrección en particular para Alemania, donde se espera una recesión del 0.7 por ciento.