El presidente de Argentina aseguró que su homólogo colombiano, Gustavo Petro, es “un comunista asesino que está hundiendo” a su país, esto en una breve descripción que dio en una entrevista con concedida a la periodista Patricia Janiot, en que se refirió en buenas palabras al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, y el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La entrevista abordó diversas opiniones del mandatario argentino sobre líderes internacionales y exmandatarios de Argentina. Durante el intercambio, Milei también se refirió al expresidente estadunidense Donald Trump como “uno de los líderes de la libertad en contra del socialismo global”. Janiot propuso un juego de preguntas rápidas, en el cual el presidente argentino debería describir a diferentes personalidades de la política nacional e internacional.
Al describir al presidente saliente de Argentina, Alberto Fernández, Milei lo calificó como “deplorable”. Sobre el expresidente Mauricio Macri, opinó que tenía buenas intenciones, pero se rodeó de las personas equivocadas. Respecto a Cristina Fernández de Kirchner y su mandato, lo definió como “la base de la decadencia argentina”, y sobre su esposo, Néstor Kirchner, expresó que fue el inicio de la peor decadencia del país.
El mandatario argentino destacó la importancia de la próxima elección, considerándola la más crucial de los últimos 40 años. En el ámbito internacional, Milei describió al presidente chileno, Gabriel Boric, como alguien con “ideas incorrectas”, y a Nayib Bukele lo calificó como “alguien que, a pesar de la adversidad, logró llevar a cabo su programa de gobierno”.
Durante la entrevista, Milei abordó su participación en el Foro Económico Mundial en Davos, donde denunció la Agenda 2030 como una agenda socialista con buenas intenciones pero cuyas políticas, según él, no han contribuido al bienestar general. El presidente señaló que en Argentina su presentación fue ignorada por “envidia”.
En relación con el paro nacional convocado en su país contra sus reformas y otras demandas sindicales, Milei afirmó que no tiene relación con reclamos legítimos de los trabajadores, y acusó a los sindicalistas de jugar un papel político para el cual no fueron elegidos. Criticó al gobierno de Alberto Fernández por altos índices de inflación, salarios bajos y una significativa brecha cambiaria.
En cuanto a la ley Omnibus, que contempla casi mil reformas y podría enfrentar obstáculos en el Congreso, Milei afirmó que no está dispuesto a negociar la libertad y que realizarán cambios y mejoras en los artículos que hayan sido denegados. El presidente argentinó enfatizó que “la libertad no se negocia”.