El gobierno de Canadá presentó un plan para mejorar la seguridad en su frontera con Estados Unidos que se basa en la detección y desmantelamiento del tráfico de fentanilo y la creación de una nueva Fuerza de Ataque Conjunta de América del Norte para luchar contra el crimen organizado transnacional.
Según un comunicado, Canadá pretenden modificar “la Ley de Inmigración y Protección de Refugiados para garantizar y ampliar nuevas facultades para cancelar, cambiar o suspender documentos de migración y cancelar, suspender o dejar de aceptar nuevas solicitudes, lo que daría a Canadá un mayor control sobre sus documentos de inmigración”.
Estas facultades, dijo el gobierno, “podrían ayudar a impedir que quienes puedan representar un riesgo para Canadá ingresen al país y evitar una mayor migración irregular hacia el sur”, además de la imposición de nuevas restricciones a los países que no faciliten rápidamente el retorno de sus ciudadanos en caso de entrada fraudulenta o de una orden de expulsión.
Además, la Agencia de Servicios Fronterizos capacitará y desplegará más equipos caninos para interceptar drogas, además de nuevas herramientas de detección de sustancias químicas en los puertos de entrada de alto riesgo.
Asimismo, Canadá aumentará “el apoyo a los organismos encargados de hacer cumplir la ley para detectar, interceptar y abordar el fentanilo y los productos químicos precursores agregando herramientas de inteligencia artificial e imágenes que ayudarán aún más a detectar drogas ilegales antes de que ingresen”.
El gobierno informó que la Policía Montada desplegará una nueva Fuerza de Tareas de Inteligencia Aérea compuesta por helicópteros, drones y torres de vigilancia móviles. “La tecnología antidrones apoyará a los oficiales de la RCMP y proporcionará vigilancia las 24 horas del día, los 7 días de la semana, entre los puertos de entrada”.
El plan tendrá un costo de 889 millones 809 mil 656 dólares.
QUIEREN ANEXARSE AL PAÍS VECINO
El presidente electo Donald Trump planteó de nuevo ayer la idea de convertir a Canadá en el estado 51 de Estados Unidos y lo consideró una “idea excelente”, en plena crisis política en su vecino del norte.
Muchos canadienses quieren que Canadá se convierta en el estado 51”, publicó Trump en Truth Social.
Ahorrarían masivamente en impuestos y protección militar. Creo que es una gran idea. ¡Estado 51!”, añadió.
Una encuesta realizada la semana pasada por el Instituto Leger mostró que al 13% de los canadienses les gustaría que su país se convirtiera en un estado de EU.
Trump mencionó por primera vez lo del “estado 51” durante una cena con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, a finales de noviembre.