El Departamento de Estado de Estados Unidos llamó a sus ciudadanos a evitar viajes a Tamaulipas ante la inseguridad y el índice de delincuencia que prevalece en el estado.
La dependencia estadounidense autorizó la salida del personal de su consulado general en Nuevo Laredo, que desde el 15 de marzo no ofrece servicios de rutina.
El Departamento de Estado pidió a los estadounidenses que viajen a esa ciudad de Tamaulipas a permanecer al tanto de las noticias y anuncios locales.
La actividad del crimen organizado, que incluye tiroteos, asesinatos, robos a mano armada, robos de vehículos, secuestros, desapariciones forzadas, extorsiones y agresiones sexuales, es común a lo largo de la frontera norte y en Ciudad Victoria.
Los grupos criminales tienen como objetivo los autobuses de pasajeros públicos y privados, así como los automóviles privados que viajan a través de Tamaulipas, a menudo tomando pasajeros y exigiendo pagos de rescate”, señala la alerta de viaje, que se estableció en su máximo nivel.
Apuntó que miembros del crimen organizado se encuentran a menudo en las calles y operan con impunidad, principalmente en la región fronteriza desde Reynosa hasta Nuevo Laredo, zonas donde la policía local “tiene una capacidad limitada para responder a incidentes delictivos”.
El Departamento de Estado apuntó que la aplicación de la ley es mayor en Tampico, Ciudad Madero y Altamira, que registran una tasa más baja de actividad delictiva.
Los viajes de los empleados del gobierno de Estados Unidos se limitan a las áreas de Nuevo Laredo y Matamoros, dentro de un radio limitado alrededor y entre los consulados estadounidenses de ambas ciudades, sus hogares, los respectivos puertos de entrada fronteriza y sitios limitados del centro, sujeto a un toque de queda nocturno.
Los empleados consulares de Estados Unidos no pueden trasladarse entre ciudades de Tamaulipas utilizando las carreteras del interior de México, ni podrán viajar a otras zonas del estado.